La identidad corporativa es la que la propia empresa tiene sobre sí misma. Incluye su filosofía, creencias, valores éticos y culturales, estrategias… Es la columna que vertebra la existencia de la compañía.
En cambio, la imagen corporativa es la percepción que el público tiene de la organización. Por último, la identidad visual es la traducción simbólica de la identidad corporativa, la parte visual.